viernes, 14 de noviembre de 2014

Telefonica

Hay equipos directivos de empresas, entre las que se podría incluir al de Telefonica, que parece piensan que aún es posible volver a los años de la burbuja inmobiliaria. Años en los que el con el mismo nivel de deuda que el actual Telefonica generaba un cash-flow un 33% superior al actual y un beneficio neto casi el doble que el actual. Pero la realidad les quita la razón y el tiempo para reaccionar se les va acabando.

La crisis se va extendiendo, los directivos no reaccionan, la empresa cada vez genera menos recursos, y mientas tanto, el Balance se va complicando, y cada vez parece más evidente que en algún momento será necesaria una ampliación de capital que tendrá el correspondiente efecto dilutivo sobre sus ratios por acción.

En la siguiente ficha de la empresa, actualizada con los resultados del tercer trimestre, pueden ver nuestra previsión.

Destinar todos los recursos que genera la empresa al mantenimiento del negocio, y retribuir a sus accionistas, olvidando la obligación de amortizar parte de la deuda, satisface a los accionistas en el corto plazo, pero es muy peligroso en épocas recesivas como la actual.

Lógicamente esto no es una recomendación de compra, simplemente es una interpretación personal de la información que la empresa comunica a los inversores. y nada impide que se pueda comprar más barata.

Saludos.

Nota: Para ir al indice de empresas y a la cartera de inversión pinchar aqui

2 comentarios:

  1. Estimado BDL. Últimamente me llama la atención comprobar en muchos blogs de inversores bursátiles de largo plazo, que se suelen autocalificar como “buy & hold”, la elección de Telefónica como empresa susceptible de ser adquirida por su tamaño, seguridad, solidez, remuneración etc. Son inversores que siguen viendo a Telefónica como sinónimo de empresa de crecimiento, de gran tamaño y con cierta ventaja competitiva, incluso parcialmente monopolística.

    Por el contrario, cuando me pregunto qué tipo de empresa es Telefónica, a mí me cuesta encajarla en alguna definición clara. Considero que no es una empresa de crecimiento (ni fuerte ni lento: no hay más que ver sus ventas y utilidades en los últimos 4 ó 5 años). Evidentemente no es una empresa cíclica. Tampoco la puedo definir como una sólida porque su negocio me parece inestable y con claros cambios en un futuro más o menos próximo. Telefónica genera caja –es cierto- pero tiene unas elevadas necesidades de reinversión continua para simplemente mantener su estructura. Además, la compañía tiene tras de sí una profusa historia de crecimiento inorgánico, que ha llenado su balance de fondos de comercio dudosos (por el activo) y bastante deuda que no logra reducir (por el pasivo). Eso sin contar también con que muchas operaciones han sido un ir y venir para acabar como estaba, sino peor (estos días se habla de vender O2 a BT por 6.000 mns€ más un porcentaje en torno al 20% del grupo resultante; pero es que O2 le costó a Telefónica en su momento más de 16.000 mns de Libras…).

    Tu texto sobre Telefónica me llevó a buscar y releer 4 artículos que escribió el extraordinario Enrique Gallego allá por junio y julio del 2002. Ya calificaba a Telefónica como una compañía con bastante incertidumbre por los cambios generados por la desregulación y por la inestabilidad del mercado latinoamericano que él veía en el horizonte. Sus perspectivas le parecían inciertas y le pronosticaba –como así sucedió- una alta volatilidad en sus expectativas, en sus beneficios e incluso en sus ingresos.


    Yo apuntaría además que la dirección de la compañía no me resulta del todo fiable. Casi siempre que analizo las decisiones de un determinado consejo de administración acabo entendiendo que mantienen una postura razonable desde el punto de vista estratégico de largo plazo. En casos como BDL, MCM, VIS, VID, IBG, ENG, BME, REE, PRM y alguna más que sigo, se puede ver que existe una identidad propietarios-dirección: las decisiones de los que manejan la empresa van encaminadas –casi siempre de forma conservadora pero segura- a ir creando valor a largo plazo. Sin embargo, no logro ver esto en Telefónica. Tengo la impresión de que tantas compraventas corporativas, tantos cruces accionariales, tanta dilución de sus propios títulos … no son en muchos casos más que operaciones especulativas o simples argucias contables de una visión muy cortoplacista, con repercusión directa e inmediata en sus incentivos salariales por encima de la visión de largo recorrido del accionista permanente.
    Saludos. Anatolia.

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    1. Hola Anatolia:

      Ya hace años que el equipo directivo de Telefónica creyó que este podía ser un negocio muy apalancado, en el que no merecía la pena amortizar el principal de los créditos, ya que la rentabilidad que conseguían con sus inversiones era muy superior a los gastos financieros gracias a unos ingresos que consideraban recurrentes, pero la crisis ha dejado bien claro que sus ingresos no son tan recurrentes como creían y ahora el Resultado de Explotación ya solo es 2,63 veces los fastos financieros.

      El problema que tienen es que desapalancarse representa vender los negocios más rentables y hacerse más pequeños quedándose con la "basura" generada en forma de Fondo de Comercio. Esto no se lo pueden permitir y seguramente a lo que estamos asistiendo es a una huida hacia adelante más que a una estrategia de crecimiento, pero como siempre solo el tiempo nos dará o quitará la razón.

      Saludos.

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